Corfú

Es Corfú, una isla, de nuevo. La ciudad del mismo nombre extiende su herencia veneciana a los pies de los visitantes. Este es el corazón del Mediterráneo. La historia de la relación entre Corfú y Napoleón no es del todo gloriosa, pero la huella dejada por la Francia imperial parece indeleble, y es a través de Corfú que el legado de Napoleón podría volver a irradiar paz en toda Grecia.

El trazado de la explanada, que separa la antigua fortaleza del casco antiguo, es una importante reliquia de la época imperial. Lo mismo ocurre con el famoso Liston Way, un grupo de edificios que bordea el casco antiguo. Ésta, con su elegante columnata, es el principal testimonio arquitectónico del paso francés. La repetición rítmica de sus arcadas refleja el estilo de diseño de la época napoleónica, similar a las de la Rue de Rivoli de París.

La época napoleónica también contribuyó al desarrollo de la enseñanza y el uso del griego como lengua para textos públicos. En 1808 se fundó en Corfú la primera academia moderna de Grecia, la Academia Jónica. Esta institución tiene como objetivo el fomento de las letras, las ciencias y sus aplicaciones prácticas mediante la enseñanza y los cursos prácticos.